La transparencia es un factor fundamental para incrementar las colaboraciones entre cofinanciadores y organizaciones filantrópicas. Así lo resaltan organizaciones especializadas en la promoción de la transparencia en el sector.

Esta institución propone lineamientos que deben regir a toda organización transparente y que pueden categorizarse en dos ámbitos: gestión y financiero (Fundación Lealtad, 2019).

  • Gestión: La organización debe mostrar sus objetivos por escrito y realizar evaluaciones a sus proyectos. Además, debe tener un sistema de seguimiento para su planificación anual.

Todos los colaboradores y donantes deben recibir al menos una vez al año un informe con las actividades de la organización. Adicionalmente, los financiadores deben tener a su disposición informes de seguimiento de los proyectos.

  • Financiero: Ser claro sobre las fuentes de financiamiento de la organización y sus actividades. Se deben divulgar abiertamente los acuerdos de colaboración con empresas, fuentes de financiamiento y campañas de captación de fondos privados (fundraising). Esto último se relaciona con la imagen transparente que debe tener una organización en sus canales de comunicación.

La información que brinde la fundación debe ser veraz y verificable, además de estar publicada en una página web o portal oficial. Se recomienda que esta plataforma sea actualizada como mínimo una vez al año con las actividades y cuentas anuales de la organización.

La literatura propone que las organizaciones filantrópicas establezcan mecanismos que permitan a estos actores comunicarse con ellas y faciliten el intercambio de información. Estos canales de información deben ser de conocimiento público y de carácter permanente. Además, se debe evidenciar un conocimiento de distintos grupos de interés en canales adecuados a sus demandas de información y accesibilidad.

Comunicación bilateral para dar a conocer la información

Si bien las organizaciones de la sociedad civil cuentan con mayor presión por diseminar esta información, la literatura propone que las motivaciones relacionadas con la generación de reputación también llevan a las organizaciones a invertir en este tema (Ebrahim, 2002).

De esta manera, se añade un elemento a los lineamientos generales de rendición de cuentas y transparencia: la comunicación bilateral. Así, la relevancia práctica de la información para las organizaciones filantrópicas recae en la elaboración y publicación de información sobre sus operaciones y mecanismos y estrategias de diseminación adecuadas a las partes interesadas, y en el establecimiento de canales de comunicación permanentes que promuevan el intercambio de ideas entre la organización y partes externas.