Índice de Capacidad Organizacional de Entidades Filantrópicas

El equipo de organizaciones que desarrollamos la iniciativa Fortalecimiento de la Filantropía Institucional en América Latina elaboramos un índice que permite analizar la capacidad organizacional de fundaciones y entidades filantrópicas.

¿Qué es la capacidad organizacional?

Es la habilidad de una organización de convertir sus recursos financieros y humanos en la realización de su misión a través de sus procesos y actividades de gestión, gobernabilidad, operación y evaluación. Para una organización sin fines de lucro es, finalmente, la capacidad de generación de valor social.

¿Por qué un índice?

En los términos más simples, un índice es una parte que «indica» o refleja un concepto más grande. Desarrollamos un índice que recoge los indicadores claves para monitorear e identificar buenas prácticas que reflejen la capacidad organizacional en la filantropía institucional en América Latina y con ello entregar una herramienta a quienes lideran o se relacionan con entidades filantrópicas para fortalecer la gestión de estas organizaciones.

¿Cómo se elaboró el Índice de Capacidad Organizacional de Entidades Filantrópicas?

Este índice, el primero de su tipo en la región, fue desarrollado por los equipos de investigadores de las 5 instituciones que han impulsado el proyecto Filantropía Institucional en América Latina.

Se basa en datos de 353 organizaciones filantrópicas en Argentina, Chile, Colombia, México y Perú recopilados en el marco del GPR y las publicaciones nacionales (Alternativas y Capacidades, 2019; Aninat & Fuenzalida, 2017; Berger & Roitter, 2018; León & Bird, 2018; Villar, 2018) que partieron de esta investigación. Combinando métodos cualitativos y cuantitativos, esta revisión de los datos se complementó con un proceso de análisis de literatura relacionado con el manejo operativo y la capacidad organizacional de organizaciones filantrópicas, y también con el levantamiento de la visión de quienes lideran entidades filantrópicas en la región.

A través del tiempo y con mejor evidencia en el futuro se espera mejorar aún más el índice, como lo que ocurre con el desarrollo de indicadores similares.

¿Cuáles son los pilares del Índice de Capacidad Organizacional de Entidades Filantrópicas?

Consta de cuatro pilares que analizan los ejes fundamentales de la gestión efectiva de entidades filantrópicas: gobernanza, gestión interna, gestión externa, y rendición de cuentas y transparencia. Cada pilar se analiza en base a un grupo de indicadores que permiten comprender los ejes fundamentales en la gestión de cada pilar.

Pilar 1 – Gobernanza

Los indicadores para representar a las variables que propone la literatura relacionada con la gobernanza buscan evaluar dos dimensiones: las características de los puestos de director o miembro de la junta, y las características de los miembros del directorio o junta directiva. La primera variable evalúa las políticas de continuidad en el cargo, la compensación y las políticas de reelección. Las características de los miembros del directorio que recogen nuestros datos revelan información sobre el número de miembros, su diversidad y participación activa en la toma de decisiones de la organización.

Pilar 2 – Gestión Interna

Distintos elementos permiten analizar la gestión interna mediante variables relacionadas con la estabilidad financiera, el alcance geográfico y de beneficiarios, la diversidad de mecanismos de intervención (programas propios o tipos de donaciones) y el uso interno de las evaluaciones para comprender necesidades, revisar la implementación efectiva de los programas y sus resultados.

  • Estabilidad financiera. Se define por la combinación de percepción de sostenibilidad (expectativa de crecimiento de ingresos y presupuesto proyectados) e instrumentos de generación de fuentes de recursos que entreguen estabilidad a la organización, como el
  • Estrategia operativa. En este indicador nos enfocamos en medir el alcance sectorial y de beneficiarios y la diversidad de mecanismos de intervención. Se refiere a la amplitud, o cuán extensas/intensivas son las intervenciones de la organización, y recoge los sectores y beneficiarios atendidos, el alcance geográfico (local, nacional o regional) y los instrumentos de intervención (programas propios o donaciones).
  • Evaluaciones y uso interno de información. Indica si se realizan evaluaciones de necesidades, procesos o resultados, y si estas evaluaciones tienen como objetivo sistematizar y difundir experiencias para recaudar financiamiento o influir en políticas públicas.

Pilar 3 – Gestión Externa

Este pilar está compuesto por indicadores de colaboración entre pares y con el gobierno, a través de aprendizaje, cofinanciamiento e implementación conjunta de programas. Además, contiene variables relacionadas con las políticas, los instrumentos empleados y el uso que se da a las evaluaciones de resultados e impacto para la vinculación con otros actores.

Pilar 4 – Rendición de Cuentas y Transparencia

Los indicadores que componen el pilar rendición de cuentas y transparencia buscan capturar las prácticas de reporte y rendición de cuentas, y los medios que la organización utiliza para comunicarse con grupos de interés. También considera la difusión por medios digitales abiertos (web, redes sociales) como espacios de publicación constante de información relacionada con proyectos, resultados y menciones de la organización.

¿Cuál es el nivel de las entidades filantrópicas en América Latina?

Según los datos recolectados por el equipo de investigadores, las entidades filantrópicas de la región muestran sus mayores fortalezas en los pilares de gestión interna y de rendición de cuentas y transparencia (con 0,53 y 0,59 puntos en una escala de 0 a 1, respectivamente), mientras que el pilar gestión externa es el de menor puntuación y el de gobernanza logra un nivel medio.

Resultados de la aplicación del índice

Las organizaciones a nivel regional muestran altos puntajes en términos del número de miembros dentro del directorio, diversidad y su participación activa en las reuniones, pero debilidades en las políticas de renovación de sus integrantes.

En la gestión interna, resaltan la diversidad de mecanismos de gestión social, el alto uso de evaluación de los programas a nivel interno. Sin embargo, existen bajos niveles relativos en los indicadores de sostenibilidad de financiamiento. El uso del endowment como fuente de financiamiento estable es bajo: solo un 40% de las organizaciones a nivel regional cuentan con este mecanismo.

En gestión externa, las organizaciones filantrópicas en la región declaran tener políticas de evaluación definidas y el 32% de las organizaciones declaran implementar evaluaciones de impacto. Sin embargo, la rigurosidad de estas evaluaciones y el uso de la información proveniente de ellas con fines de difusión y vínculos externos se encuentran en un nivel bajo.

Por último, la rendición de cuentas y transparencia muestra niveles homogéneos entre las organizaciones filantrópicas en América Latina. Sin embargo, la difusión es limitada: solo un 41% de las organizaciones filantrópicas institucionales en Latinoamérica publican estados financieros.

 

 

Más información

Para más información y detalles del índice y su análisis para las entidades filantrópicas de México, Colombia, Perú, Chile y Argentina, puede revisar el libro “Hacia el Fortalecimiento de la Filantropía en América Latina”.